Construcción, uno de los más afectados por robo de carga.

Construcción, uno de los más afectados por robo de carga
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El robo al transporte de carga en México ha alcanzado niveles alarmantes en los últimos años, y el sector de la construcción es uno de los más afectados. Materiales como cemento, acero, maquinaria y herramientas de alto valor son blanco frecuente de los delincuentes, lo que representa pérdidas económicas significativas para las empresas y afecta los tiempos de entrega en proyectos clave.

Estadísticas alarmantes

De acuerdo con la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP), el 2024 cerró con un aumento del 14% en los robos al transporte de carga en comparación con el año anterior. En la industria de la construcción, las pérdidas por este delito superaron los 3,500 millones de pesos en los últimos 12 meses. Los insumos robados suelen ser revendidos en mercados ilícitos, agravando el problema.

Zonas y carreteras de mayor riesgo

Algunas de las rutas más peligrosas para el transporte de materiales de construcción incluyen:

Carretera Puebla-Orizaba (Autopista 150D): Utilizada para conectar zonas productoras con el Golfo de México, es una de las más vulnerables para el robo de carga pesada.
Carretera México-Puebla (Autopista 150D): Altamente transitada por camiones que transportan cemento y maquinaria, registra más del 20% de los robos en este sector.Carretera México-Querétaro (Autopista 57): Una de las principales vías de transporte industrial, especialmente peligrosa en el tramo entre San Juan del Río y Querétaro.

Estrategias para prevenir el robo de carga

Ante este panorama, es vital que las empresas constructoras tomen medidas para proteger sus bienes en tránsito. Algunas de las estrategias más efectivas incluyen:

  1. Contratar servicios de custodia especializada: Empresas como CLT Protección ofrecen un seguimiento constante con vehículos patrulla y sistemas de monitoreo GPS para garantizar la seguridad del recorrido. Esto es especialmente importante para el sector de la construcción.
  2. Implementar tecnología de rastreo: Contar con dispositivos GPS portátiles y fijos permite conocer la ubicación exacta del transporte en tiempo real y actuar rápidamente en caso de emergencia.
  3. Capacitar a los conductores: Los operadores de transporte deben recibir entrenamiento para identificar y reaccionar ante posibles riesgos, así como mantener protocolos de comunicación claros con la empresa.
  4. Optimizar las rutas y horarios: Es recomendable evitar horarios nocturnos y carreteras con alta incidencia delictiva.
  5. Fortalecer las medidas de seguridad en los camiones: Sistemas de cierre electrónico, alarmas y cámaras de seguridad pueden disuadir a los delincuentes.
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